sábado, 19 de septiembre de 2009

19-09-09 -- Feliz Despertar Lykkelig

Empecemos por anoche... 18/09/09 noche cultural en Oslo; conciertos en la calle, conciertos en garitos, exposiciones, espectáculos... en resumen la gente en la calle andorreando sin parar de cazcalear. Voy con David {recordad: leer "Deivid"} el inglés, es un punto de tío, estamos haciendo buenas migas, quiere aprender algo de español (por ahora sabe decir: "chucha/cuchi el tío", "¿dónde está la fiesta?" y "estoy muy contento"). Entre tanta oferta nos decantamos por un rato de concierto callejero y luego (tras típica cola nórdica) podemos acceder a un concierto de Jazz (pianista sudafricano con ritmos tribales rompiendo el compás por momentos...), luego vamos a la zona del puerto que hay fuegos artificiales pero no llegamos a tiempo (no se puede tener todo en esta vida del señor Jesucristo Jaèn, como bien dice el Marqués de Torrepatio y demás figuras de la nobleza).

Tras llamadas e indicaciones controvertidas y caminatas con "loop", encontramos al grupo de españoles y otros compis de Resi (entre ellos unas polacas muy graciosas y unas francesas también muy majas aunque estas últimas en otras residencias). No hay plan definido pero no hace ni falta, después de algunos intentos fallidos acabamos en un pub-disco con bailoteo y cachondeo aunque después de un día tan largo no llegamos hasta el final y dejamos al grupo allí para volver al sobre con sello de mil sueños y suaves sábanas sin pegamento no sin antes pasar a preguntar por el bar en el que perdí la chaqueta (aunque no me habían llamado), y tras encontrar negativas respuestas de los camareros consigo hablar con el mismo encargado del día anterior que por sorpresa y para alegría inmensa de mi persona.... {rrrrrrrrrchsss} ¡¡me trae la chaqueta!! (con algo más de mierda, pero ¡bendita sea!). Al parecer Oslo es una de las ciudades más seguras (según dicen las estadísticas y los mitos urbanos), pero dejando a un lado este feliz desenlace, he subido mi nivel de precaución un 20% (ahora voy como el de la foto, chaqueta en un hombro y un palo en la otra).

Hoy ha sido un día tranquilito; solecito, filetes empanados a mitad de precio (caducan el lunes), partidillo de fútbol y noche con fiesta tranquilita en el 13º piso de increíbles vistas (mejores por la noche), había también un nutrido grupo de simpáticos españoles y demás peña internacional (hemos pactado un partidillo mañana a las 17:00, espero que el Betis haga lo propio a la misma hora). La mayoría se han ido a continuar la fiesta pero el cansancio y la cartera no me lo han permitido... [NOTA MENTAL: rescatar las notas mentales]

3 comentarios:

Unknown dijo...

ostras!! yo ya daba por perdida la chaqueta.

Juan J. Bustos Pérez dijo...

ejajeja yo también! pero al final hubo suerte...

Unknown dijo...

Más q un quebrao...como siempre!!jajajaja.

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